Friday 3 July 2009

Banksy versus Bristol Museum

Desde temprano se van haciendo las filas de peregrinos que se dirigen al Museo de Bristol. Desde Park Street se ven subiendo, pasando de los despachos de diseño, la universidad y las boutiques. Ya afuera del museo se van ensamblando los cuerpos hasta que se hace una línea de espera. Desde hace mucho tiempo, quien sabe cuanto no ha habido una exhibición local que haya atraído a tanta gente. Del Norte, del Este han venido a ver la obra de la oveja negra de Bristol, la joya renegada, el graffiti y su versión pensante. Nadie conoce su identidad, se dice que sus padres creen que es decorador de interiores y me confesó una amiga periodista que un día lo conoció pero que no lo sabía en ese momento. Convertido en el artista pop, por catalogarlo de alguna forma, del momento, vendiendo obras a Angelina y Bradd Pitt.
El edificio del museo se nota mas fastuoso que de costumbre. En el recibidor se aprecia un camión de helados que ha sido bombardeado quizás por una bomba molotov y su sombrero de helado se va derritiendo por sobre el parabrisas estrellado. Este es el centro de atención y en donde se puede tomar el mapa de la exposición. Los encargados constantemente renuevan la torre de papel que los visitantes consumen de sobremanera. Alrededor, esculturas estilo griego, el ángel del Norte con carmín de labios demasiado rojo sangrando por el labio, minifalda y una lata de lager en una mano y un cigarrillo en la otra. Un león de palacio de justicia con un látigo de domador saliendo de sus fauces como palillo de dientes.
En el centro la exposición los mismos animatronics que se mostraron originalmente en New York en una tienda de animales y que presentan lo mismo a un mono pintor produciendo en cadena que a una conejita maquillándose.
Para entrar a la sala principal donde se ofrece su técnica mas conocida hay que esperar nuevamente tras la cola de los ansiosos curiosos. En un extremo un supuesto taller que revela plantillas originales y un archivero que contiene según sus etiquetas buenas ideas, malas y basura. Cuadros clásicos intervenidos y aquí es en donde se da el aspecto mas propositivo del artista. Siendo originario de Bristol es obvio que Banksy camino inadvertido por sus sobrios pasillos varias veces, entre esas colecciones de animales disecados, aburridos platones, geología, minerales y arte victoriano. Como que no quieres continuas caminando las distintas salas y en eso entre un escaparate con una detallada descripción de las técnicas de apareamiento de los mamíferos te encuentras una copia del Vanity Fair de este mes. Detalles que deben de pasar desapercibidos para el visitante despistado pero que rebotan en el cerebro del alerta y sorprenden por lo brillante e irreverente.



Collage del folleto de la muestra.