Después de trecientos veinticinco tacos (aprox.), chicharrones, carnitas, barbacoa varias cervezas León y Pacífico me siento más aterrizado, contento, una lástima porque ya sólo faltan algunos dias para partir. Ahora con nuestra bebé este volver ha sido diferente al de años anteriores. Ha sido muy agradable ver a algunos amigos, a la familia; sentir su aprecio, su cariño. Escuchar como con todo y los problemas se puede seguir viviendo aquí contento.
La televisión sigue siendo una porquería y no me sorprende tanto que en los medios no se informe la verdadera dimensión de la crisis económica.
Sin comparaciones, porque las proyecciones serias de la crisis pintan duro para todas las regiones, aquí es como si hubiera una niebla que no deja ver que se está parado sobre las vías de un tren que se aproxima.
El dólar en relación con el peso por lo pronto, va bajando.